Todo comenzó en 2018 cuando Félix Montaner, después de trabajar durante años en consultoría financiera, se dio cuenta de algo frustrante: las empresas tomaban decisiones importantes basándose en hojas de cálculo estáticas que no reflejaban la complejidad real del mercado.
"Veía directores financieros presentando proyecciones que sabían que cambiarían al día siguiente", recuerda Félix. "Las herramientas existentes no permitían explorar escenarios múltiples de forma ágil. Era como navegar con un mapa desactualizado."
Así nació cidr-aoramo. No como una empresa tecnológica más, sino como un puente entre la teoría financiera y las decisiones del mundo real. Comenzamos trabajando con tres empresas medianas en Madrid. Hoy, nuestros modelos han contribuido a decisiones que involucran más de 450 millones de euros en inversiones.